La Seremi de Salud Metropolitana determinó multar a la Clínica Las Condes luego que el presidente de su directorio, Alejandro Gil, accediera a una tercera dosis de la vacuna contra la covid-19.
Se trató de un polémico hecho ocurrido en julio pasado, cuando el Gobierno aún analizaba la opción de reforzar la vacunación ante un posible descenso de la inmunidad con el paso de los meses.
Fue así como Gil llegó hasta el vacunatorio de la clínica y obligó a que se le inoculara con una dosis de Pfizer, ya que había completado su esquema de vacunación con Coronavac. Esto por recomendación del médico Héctor Ducci luego que un examen arrojara que Gil aparentemente no poseía anticuerpos.
Como la vacunación fue subida al sistema del Ministerio de Salud, de inmediato se encendieron las alarmas y se inició un sumario sanitario que ya terminó.
Según declaró la seremi de Salud, Paula Labra, el recinto asistencial fue multado con 600 UTM, más de $31 millones. Junto con ello, se multó con 150 UTM (casi $8 millones) al director médico de la clínica.
“Este hecho fue premeditado, fue intencionado, se sabía que se estaba incumpliendo (la norma)”, dijo Labra a Canal 13.
La autoridad sanitaria agregó que la suspensión del vacunatorio del recinto para aplicar dosis contra la covid-19 seguirá vigente.
Pero la polémica está lejos de terminar ya que el Gobierno denunció lo ocurrido ante el Ministerio Público, lo que llevó a la Fiscalía Oriente a iniciar una investigación por aprobación indebida en contra de Gil.
Fuente: biobio